Las placas de cocina son un elemento clave en cualquier hogar. Sin embargo cuando llega el momento de tomar la decisión de reparar o cambiar tu vitrocerámica, este proceso puede ser abrumador. Las placas vitrocerámicas han sido testigo de innumerables recuerdos, desde intentos culinarios hasta reuniones espontáneas con amigos. Sin embargo, ha llegado el momento de enfrentarnos a la realidad: ¿debo cambiar vitrocerámica o repararla? ¿Qué es lo que realmente vale la pena?
Al enfrentarnos a la disyuntiva de si debemos cambiar la placa de nuestra vitrocerámica o simplemente repararla, varios factores entran en juego, desde el coste de la mano de obra hasta consideraciones sobre eficiencia y tecnología actual.
En la siguiente tabla, detallamos criterios esenciales para determinar si es más adecuado reparar tu actual vitrocerámica o proceder a cambiar la placa por una más moderna.
| Problema | ¿Reparar o Cambiar? | Razón |
| Prestaciones obsoletas | Cambiar | Falta de funciones modernas como bloqueo de seguridad o indicador de calor. |
| Superficie rayada o rota | Cambiar | Dificulta la limpieza y puede ser peligroso. |
| Problemas de encendido o funcionamiento | Evaluar | Puede ser un problema simple o indicio de averías mayores. |
| Insuficiencia o exceso de fogones | Cambiar | No cumple con tus necesidades actuales de cocina. |
| Fallas eléctricas | Cambiar | Riesgo de seguridad y posibilidad de averías recurrentes. |
| qawe3sea | Cambiar | No justifica el gasto comparado con adquirir una nueva. |
Al considerar la actualización a una nueva vitro, o incluso a placas de inducción, es esencial comprobar si estas tienen la misma medida que la anterior para adaptar el hueco de nuestra encimera con el mínimo esfuerzo. La instalación de encimera eléctrica moderna puede requerir ajustes, especialmente si nos decantamos por una placa de inducción que, por sus características, podría necesitar una instalación más compleja debido a sus requerimientos energéticos específicos.
El proceso de instalación comienza con la desconexión segura de la vitrocerámica actual. Después, se procede a retirar la unidad dañada, momento en el que las pinzas de sujeción juegan un papel crucial para liberar el dispositivo de su anclaje. Este proceso debe hacerse con cuidado para no dañar la encimera eléctrica o la estructura que la sostiene.
Una vez removida la unidad antigua, el siguiente paso es verificar que la nueva vitro se ajuste perfectamente en el espacio existente. Si la nueva placa es de misma medida, el proceso es directo; sin embargo, si el tamaño varía, quizás sea necesario adaptar el hueco en la encimera, lo que puede incrementar el costo de la mano de obra y el tiempo de instalación de encimera.
Finalmente, al considerar el cambio de una placa vitrocerámica por una nueva vitro o placa de inducción, es importante considerar no solo el costo inicial sino también los beneficios a largo plazo, como la reducción en el consumo de energía, la mejora en la seguridad y la eficiencia en la cocción. Este análisis nos asegurará tomar la decisión más acertada, maximizando nuestra inversión y disfrute culinario.
Si has decidido que es momento de cambiar tu vitrocerámica, aquí te dejamos una tabla simplificada con los pasos para para hacerlo tú mismo:
| Paso | Descripción |
| Medición y Verificación | Asegúrate de que el nuevo equipo se ajuste al espacio existente y verifica las conexiones eléctricas. |
| Desconexión de Energía | Primordial para evitar accidentes. |
| Retiro de la Vitrocerámica Antigua | Usa herramientas básicas para remover la silicona y los fijadores, si los hay. |
| Instalación de la Nueva placa Vitrocerámica | Asegúrate de que encaje perfectamente en el espacio y realiza las conexiones eléctricas correspondientes. |
El proceso de decidir entre reparar o cambiar tu vitrocerámica implica considerar tanto aspectos emocionales como prácticos. La obsolescencia de funciones, el estado físico de la placa y el costo de las reparaciones son factores decisivos. Si optas por renovarla, recuerda que esta es una oportunidad para modernizar tu cocina, mejorando no solo la estética sino también la funcionalidad y seguridad de tu espacio culinario.
Consejos Finales:
Recuerda que renovar tu vitrocerámica no solo es una inversión en tu cocina, sino también en la calidad de vida y seguridad de tu hogar.
Utilizamos cookies propias y de terceros para obtener datos estadísticos de la navegación de nuestros usuarios y mejorar nuestros servicios ofreciendo una experiencia de navegación personalizada. Si aceptas o continúas navegando, consideramos que apruebas su uso. Puedes obtener más información sobre nuestra política de cookies
Política de privacidad